Si con Sagitario toda relación se toma con humor y se vive con alegría, Venus en Capricornio parece ver la vida social con la seriedad de una roca.
Sus amistades, amores o incluso sus sociedades de negocio deben tener algo que aportarle, pues de lo contrario carecen de valor y pasa de ellas. Aunque es una posición increíble para los negocios y para sobresalir en el ámbito laboral, es un poco difícil para las relaciones de pareja que, en esencia, deberían ser más relajadas.
¿Qué significa tener Venus en Capricornio?
Metafóricamente, Capricornio es la cuerda del arco que necesita suficiente tensión para desplegar todo su poder. Todas sus relaciones sociales requieren ese componente de tensión para poder ser efectivas. Claro está, eso puede ser incómodo para aquellas personas que no estén acostumbradas a sus modos tan formales.
Aunque a simple vista no lo parezca, esto normalmente viene de su pasado, de relaciones fallidas donde dio más de lo que le correspondía. Es un poco como la historia de la conocida formalidad japonesa, que surgió luego de innumerables guerras civiles y que les ha permitido llevar la fiesta en paz durante décadas. Lo cierto es que aunque ya no la necesiten sigue estando entre sus costumbres.
Así mismo, la persona de Venus en Capricornio se protege detrás de su coraza de rocas y no permite que los sentimientos de los demás le perturben o le desvíen del camino que se ha propuesto, aunque esto no sea realmente necesario. Sin embargo, esa coraza no implica falta de afecto natural, al contrario, su amor es tan genuino y estable que no se dará el lujo de entregárselo a cualquier persona.
En lo material, suele ser una posición muy próspera, pues da al nativo la solidez y estabilidad de una montaña. Persigue el dinero con ahínco y jamás abandona una empresa una vez iniciada, por lo que consigue fácilmente la estima de sus socios, colegas o jefes.
Es interesante el hecho de que a pesar de sus maneras secas y distantes, es la mejor pareja o mejor amistad que se pueda tener. Su constancia hace que cualquier relación dure hasta la muerte, y su poder interior es tal que jamás dejará sucumbir a ningún ser querido que necesite su ayuda.
Desde la sombra, puede ser muy desconfiado, y ver cualquier relación de forma enteramente utilitaria. Puede verse envuelto en matrimonios por interés o hacerse de amigos únicamente para obtener favores. Su sed de estatus social también puede ser desmesurada, llevándole a desechar relaciones valiosas con tal de alcanzar su objetivo.
Venus en Capricornio en hombre
El hombre de Venus en Capricornio puede ser fácilmente un avatar de Christian Grey (50 sombras). Desea el control, pero no al estilo escorpiano, sino de una manera más formal y estructurada. Por eso, es normal que busque relacionarse con mujeres más jóvenes que él, a quienes pueda introducir dentro de su reservado mundo sin que le intimiden o desafíen.
Pese a lo seco que pueda ser, vale la pena el esfuerzo de conquistar su corazón, porque una amor tan estable y duradero como el que ofrece es difícil de encontrar.
Venus en Capricornio en mujer
Venus en Capricornio hace mujeres aplomadas y con los pies muy bien puestos sobre la tierra. Sabe lo que quiere, cómo lo quiere y cuándo lo quiere, por lo que no conviene tratar de engañarla o endulzarla porque con ella no funcionará. La sinceridad, tenacidad y paciencia son los ingredientes clave que siempre valorará de cualquier pretendiente.
Igualmente, no se deben descuidar los detalles con ella, porque aunque no sea la flor del romanticismo es muy exigente en guardar las formalidades dentro de lo que implica cortejar a una dama. Además, por lo general será muy dura y nunca pondrá las cosas fáciles, principalmente porque sabe que todo lo bueno en la vida cuesta.
Otra cosa que valora en un hombre es su ambición en la vida. Por si misma ella aspira a lo más alto de la escala social y nunca esperará menos de la pareja que elija para sí.
